Una multitud de personas acompañó este sábado el sepelio de la joven Rosa María Sánchez, quien el pasado jueves fuera asesinada por dos hombres mientras atendía la caja de un asadero de pollos en el barrio Centro, del municipio de Malambo.

En medio del dolor por el vil crimen, los asistentes clamaron justicia por lo ocurrido y a exigir las penas más grandes contra los dos hombres capturaoas tras el homicidio: Jesús David Daza Hernández y Esneider Rafael Sarmiento Buelvas, quienes se dieron a la huida en una moto, pero se cayeron y una patrulla de la Policía los interceptó.

El féretro partió de la casa de Rosa María y luego fue llevado hasta el lugar en donde fue asesinada, establecimiento comercial que permanece cerrado. Luego a bordo de un vehículo fúnebre fue llevado el ataúd hasta el municipio de Soledad, en donde recibió cristiana sepultura.

Presuntamente, el móvil del homicidio fue la extorsión al dueño del establecimiento pues a los aprehendidos se les encontró panfletos del grupo delincuencial de los ‘Restrojos-Costeños’.

La joven, de 20 años, le estaba haciendo el turno a la cocinera, pero en la tarde el administrador le pidió el favor que se quedara un momento en la caja mientras iba a su casa, que queda cerca al negocio.

"En ese momento fue que llegaron esos hombres. No sé si entró uno o los dos, pero me cuentan que se metieron por la entrada de la cocina, llegaron a la caja y enseguida le dispararon a mi hija tres balazos y luego tiraron allí mismo dos panfletos", contó Gladys Rojas, mamá de Rosa, tras los hechos.

Se espera que tras este lamentable episodio las autoridades intensifiquen su lucha contra este flagelo que golpea a la comunidad de Barranquilla y el área Metropolitana.